Estamos acostumbrados a que los relojes de pulso estén fabricados en cajas de latón, bronce, acero inoxidable, plástico, oro, plata, titanio o platino, todos ellos materiales clásicos usados por la industria relojera. Pero son varios los fabricantes que han intentado con otros llegando a multiplicarse el uso de algunos de ellos.
Relojes con piedra.
En 1985 la empresa Tissot lanza el primer reloj hecho en caja de granito, particularmente de piedra de los Alpes suizos. El mismo se dio en llamar el Tissot Rock Watch. Lo más interesante era la condición de pieza única de cada uno de ellos, dado que el patrón o el color del granito nunca era el mismo. Por un tiempo fueron furor y era usual verlo en las muñecas de la gente. Pronto ese furor cedió y la moda se perdió entre las montaña.
Relojes de meteorito
Obtener metal de meteorito nunca fue algo difícil, pero encontrar aquellas piezas que suministraran patrones de diseño aptos para decorar una esfera ya es otra cosa. Aquí se trata de relojes con cajas de materiales comunes para la industria pero con una esfera o fondo realizado a partir de una lámina de meteorito pulida hasta revelar un diseño intrincado que no se encuentra en otros materiales. Justamente se denominan “esfera meteorito” y la comenzaron a adoptar la mayoría de las grandes manufacturas a finales de la década pasada para ediciones especiales de sus modelos icónicos.
La palabra meteorito aquí no se utiliza en sentido figurado, porque el dial de estos relojes está hecho realmente de metales extraídos de una roca que cayó sobre la Tierra procedente del espacio. Al cortarla en finas láminas y pulirlas, quedan a la vista las minúsculas tiras de hierro y níquel cristalizadas después de millones de años viajando por la Vía Láctea, que crean patrones únicos y enormemente atractivos.
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| Jaeger-LeCoultre Master Calendar esfera meteorito |
Es lo que se conoce en el mundo científico como estructuras de Widmanstätten (también conocidas como estructuras Thomson) y, según Wikipedia, son el resultado del intercrecimiento de bandas de taenita y camacita (dos aleaciones de hierro y níquel), producidas por un enfriamiento muy lento durante un lapso prolongado y presentes en ciertos meteoritos metálicos.
Las esferas de los relojes se nutren especialmente de dos meteoritos muy famosos, tanto por su importancia histórica como por poseer estas características: el Muonionalusta, que cayó en la frontera actual entre Suecia y Finlandia aproximadamente un millón de años antes de Cristo y que es de los más antiguos que se conocen en la Tierra; y, sobre todo, el Gibeon, que fue hallado en Namibia.
A pesar de lo que mucha gente pueda pensar, los fragmentos de meteorito no son caros, sobre todo si su precio se compara con las cifras que se mueven en la relojería por los metales preciosos. Ahora mismo cualquiera puede comprar en eBay trozos de más de 200 gramos del Gibeon por menos de 1.000 dólares, y con eso se pueden fabricar decenas de esferas.
Relojes de madera
No son una novedad. Se han fabricado desde hace muchos años y han tenido una aceptación en la medida en que las maderas tengan un tratamiento que las haga resistente a la sudoración y los golpes. Es que las maderas suelen dilatarse y contraerse de acuerdo a la temperatura y humedad haciendo que se presenten grietas y roturas insalvables.
Uno de los desarrollos más recientes corresponde a Lengas Wear, una empresa desarrollada por dos veinteañeros argentinos. Parte de lo que recaudan lo donan a una fundación que hace reforestación en la Patagonia. La madera utilizada es de árboles caídos y por cada accesorio que venden plantan un árbol en la Patagonia. Ya llevan plantados más de 11 mil árboles.
Por supuesto lo económico del material hace que existan muchas marcas que los fabrican con diversa aceptación.
Relojes de polvo lunar
El Moon Dust Red Mood Chrono, es un reloj cuya esfera se ha hecho con polvo lunar, si, aquel que surge del bombardeo de micrometeoritos que han pulverizado la superficie rocosa creando una capa de polvo extremadamente fina y pegajosa. Es un objeto preciado para los fanáticos de las aventuras espaciales.
Existen tres modelos de Moon Dust-DNA que llevan una recreación de la superficie lunar esculpida a mano en la carátula con polvo lunar. Ostenta una caja de 46 mm de diámetro, hecha en oro rojo y el bisel está recubierto de fibra de carbono, una correa de caucho negro, aunque los fanáticos también pueden optar con una correa de cocodrilo entretejido con fibras de carbono y fibras recuperadas de los trajes espaciales usados en la Estacion Espacial Internacional (ISS).
El segundero está colocado a las 9 horas y tiene una cruz con cuatro palas evocando la forma de los sátelites solares. Las manecillas centrales llevan una capa de SuperLuminova de emision azul que nos invita a un ambiente nocturno. El polvo lunar y las fibras de la ISS son auténticos y están certificados. Los tres modelos forman colecciones limitadas de 1,969 piezas cada una.
Relojes de hierro del Titanic
La impresionante caja de 50 mm de este tercer reloj tiene una historia, su bisel tiene acero estabilizado oxidado del Titanic. El diseño incorpora también detalles inspirados por el increíble barco. Sus manecillas, por ejemplo, en forma de anclas.
Es de la marca de relojes Romaine Jerome que lo ha hecho posible al crear la línea Titanic-ADN dentro de una colección llamada “ADN de famosas leyendas” .
Son modelos únicos fabricados a partir de auténtico metal rescatado del naufragio de la embarcación hundida a más de 3.800 metros de profundidad.
Los fragmentos originales extraídos del casco han sido mezclados con acero para crear una aleación especial, que combinada con cerámica, platino, oro y brillantes dan como resultado la exclusiva línea de relojes que cuestan entre 5.000 y 150.000 euros dependiendo del modelo.
Las agujas están inspiradas en el ancla del transatlántico y ensambladas sobre un dial de color negro realizado a partir de carbón obtenido de piezas del barco.
La edición fue limitada únicamente a 2.012 piezas en conmemoración al año en que se cumple un siglo del naufragio.
Relojes de lava volcánica
El Eyjafjallajökull-DNA, es un reloj que contiene cenizas del famoso volcán islandés que el 14 de abril de 2010 dejó estancados a más de 100,000 viajeros en diversas partes del mundo. Esta pieza guarda una historia de recuerdos de fuego y lava.
Con una esfera que refleja los efectos de la lava en la roca volcánica, el Eyjafjallajökull-DNA Burnt Lava, es el más reciente de los cuatro modelos que integran la colección que rinde homenaje a este volcán islandés, se distingue por un diseño que reproduce las hermosas texturas procedentes de las entrañas de la tierra.
En edición limitada de 99 piezas, esta creación, llamada comúnmente “Volcano” y resultado del ingenio de los maestros relojeros de Romain-Jerome, presenta una espectacular esfera hecha a mano con auténtica roca volcánica, colocada en una platina de ónix por un artesano para reproducir el rompimiento de la roca bajo la presión de la lava.
Pintada a mano en esmalte frío rojo y amarillo, la lava da la impresión de haberse quedado atrapada en las fisuras que la violenta erupción ha dejado entre las rocas, fenómeno que aparece grabado en el reverso de la caja, realizada en acero con recubrimiento de PVD negro.
Relojes de De Lorean
Como hemos notado RJ es una de las marcas más creativas en este sentido. Un ejemplo de ello es lo logrado con uno de los autos más icónicos en la cultura cinematográfica, que es sin duda el DeLorean DMC-12 ( el vehículo de la legendaria película Back to the Future).
Además de tener un contador inspirado del tablero del coche, su bisel de acero cepillado contiene elementos de la carrocería original del DMC.
Ésta sí que es una máquina del tiempo.
La fabricación de éste se limitó a 81 unidades, simple hecho que convierte a cada uno de los 81 en una pieza de colección. Cada reloj DeLorean cuesta 15,900 dólares.
Relojes de Tantalio
El tántalo o Tantalio es un metal gris, brillante, pesado, dúctil, de alto punto de fusión, buen conductor de la electricidad y del calor y muy duro. Es muy resistente al ataque por ácidos; se disuelve empleando ácido fluorhídrico o mediante fusión alcalina.
Su nombre recuerda a Tántalo, hijo de Júpiter y padre de Níobe. Sufrió un castigo mítico por entregarles la bebida de los dioses (la ambrosía) a los humanos. Zeus lo condenó a la sed eterna y así, sumergido, cuando intentaba beber, las aguas se apartaban. Se relaciona este fenómeno con la cualidad del metal de no ser atacado por los ácidos.
Fue descubierto por el sueco Anders Gustaf Ekeberg en 1802 y ahora varias firmas están fabricando sus cajas con el mismo.
Mont Blanc ha sido uno de los primeros fabricantes en usar este material. Otros prefieren utilizarlo para los brazaletes.
Hublot, Ausdemars Piguet, Omega, son algunos de los otros que también juegan con él.
Conoces algunos más ?
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